Septiembre › Diciembre 2024
Terminamos el 2024 con el décimo número de Sonus Litterarum. Un número que abarca múltiples temas fascinanstes. El primero de ellos es el estreno de dos óperas en nuestro país: Parsifal de Richard Wagner y Beatrix Cenci de Alberto Ginastera.
El primer estreno fue realizado el 18 de abril de 2024 en el Teatro Bicentenario de León bajo la dirección musical de Guido Maria Guida y la dirección escénica de Sergio Vela. Hugo Roca Joglar conversa con este último para develarnos el transfondo de la apuesta escénica de una obra maestra que, increíblemente, se escucha por primera vez en nuestro país a 142 años de su creación en Bayreuth.
La segunda ópera, estrenada en el Palacio de Bellas Artes, tuvo cuatro funciones el 13, 15, 17 y 20 de octubre de 2024. Beatrix Cenci de Alberto Ginastera, es una obra que se ha ejecutado muy pocas veces en el mundo y tuvimos la oportunidad de presenciarla bajo la fantástica batuta de Julia Cruz y la puesta en escena de Marta Eguilior. Gladys Zamora conversó con ambas: con Eguilior antes del estreno y con Cruz después. Esto nos permite tener una visión mucho más profunda tanto de la puesta en escena como de la propuesta musical.
Joevan de Mattos Caitano, investigador de origen brasileño radicado en Alemania, ha hecho una muy interesante investigación sobre la presencia de las compositoras mexicanas en los legendarios Cursos de Verano de Darmstadt.
Entre ellas está nuestra gran compositora Georgina Derbez que, en este número, hace una reflexión de su trabajo relacionado con la fotografía y el vídeo.
En nuestras columnas tenemos el bello texto de Emilio Hinojosa Carrión: Vergüenza inspirado en una fotografía de Gerardo Suter. Hinojosa nos lleva al mundo sonoro del silencio de la máscara; de los que nos dice al callar.
Por su parte, Rubén López-Cano hace una reflexión sobre “La investigación artística formativa en música: preguntas frecuentes.” Los temas propuestos brillantemente por López-Cano hacen de éste, un texto imprescindible para todos aquéllos involucrados en la investigación y la enseñanza de la investigación.
En nuestra sección de reseñas se incluye la referente a los múltiples homenajes realizados en torno a la figura de Javier Álvarez, compositor fundamental en la historia de la música mexicana y miembro muy querido de la comunidad musical. Un año después de su muerte, Ricardo Rozental nos narra cómo fue recordado en distintos lugares de nuestro país.
En esta décima edición iniciamos un nuevo capítulo dedicado a los discos de música mexicana o de músicos mexicanos que se han convertido en piezas de colección ya que fueron hechos en formatos que han dejado de usarse, como los LP, o que están en vías de extinción como los CD. En esta primera entrega tenemos el primer LP del Ensamble Da Capo, el primer grupo de cámara dedicado a la música contemporánea auspiciado por la UAM Iztapalapa cuyo director de cultura era nuestro añorado Nacho Toscano. Los integrantes no pueden ser más emblemáticos: en la flauta Marielena Arizpe, en el oboe Leonora Saavedra, en el piano Lilia Vázquez y en el cello Álvaro Bitran. Un material imperdible.
El segudo disco es un CD doble con la primera ópera de Luis Jaime Cortez: Luna, una obra estrenada en 2003 en el marco del Festival Internacional Cervantino. Luna tiene un libreto de Antonio Zúñiga y la música combina instrumentos prehispánicos con los tradicionales pero alejado siempre de una idea folklorizante. Luna explora el tema de la muerte desde el punto de vista de una niña. Una obra llena de magia sonora que vale la pena compartir con nuestros lectores/escuchas.
Por último, despedimos a dos grandes músicos en este final del 2024. Rohan de Saram (1939-2024), extraordinario cellista nacido en Sri Lanka y que hizo su vida musical en el Reino Unido y en el mundo como cellista del Cuarteto Arditti y como solista en algunas de las grandes obras del siglo XX. Hilda Paredes nos comparte anécdotas de su larga relación con este músico fuera de serie.
Marlos Nobre (1939-2024) , compositor brasileño, fue uno de los compositores más importantes de su país. Ganador en 2005 del Premio Iberoamericano de la Música “Tomás Luis de Victoria” por su “maravillosa trayectoria creativa y la originalidad de su pensamiento sinfónico.” Nobre tuvo una larga relación con México gracias a su amistad con Manuel Enríquez y pudimos escuchar su música durante muchos de los conciertos del Foro de Música Nueva.
Ana Lara